2. No romper la cadena del frío.
3. Mantener la nevera siempre limpia y en óptimas condiciones.
4. Extremar las precauciones en la congelación.
5. Descongelar de forma controlada y nunca volver a congelar.

7. Cocinar con calor intenso para destruir los gérmenes. Mantener los alimentos bien fríos o calientes, evitando las temperaturas templadas.
8. Evitar las contaminaciones cruzadas: el paso de microorganismos de un alimento a otro por contacto directo o a través de utensilios o superficies.
9. Extremar la higiene personal. Las manos son un instrumento más.
10. Disponer y mantener los utensilios, las superficies y el mobiliario de la cocina en óptimas condiciones de higiene.
Pincha aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario